Sintiendo la naturaleza
Era una mañana soleada la pequeña Oli dormía plácidamente en su cama. Sin embargo, un ruido la despertó de un susto. Era un ruido muy agudo que molestaba mucho a la ardillita y no la dejaba dormir. Se asomó por la ventana para ver de qué se trataba y se encontró a su amigo el topo tocando un instrumento muy grande. Como tenía curiosidad, bajó las escaleras para llegar a la puerta y ahí estaba el saltamontes Andrés tocando lo que el llamaba el violín. Cuando lo fue a tocar, el violín tenía un tacto muy agradable.
Le seguía picando la curiosidad así que fue a visitar al búho Leonardo para averiguar más.
Pum. Pum. Pum. Llamó Oli a la puerta.
-¿Leonardo? - preguntó.
-Hola, Oli, No te oía. Estaba tocando el trombón.
-¿Era ese sonido tan grave que se escucha?
-Sí. A veces para relajarme me gusta tocarlo.
-Puedo verlo.
-Por supuesto.
Y se dirigieron al salón de la casa del búho, donde se encontraba un instrumento muy grande de color dorado.
-Oli, ¿quieres aprender más sobre los instrumentos?
-Sí.
-Estupendo. Pues vamos a mi laboratorio.
Mientras se dirigían al laboratorio de Leonardo, éste le iba explicando que hay diferentes tipos de sonidos y que cada instrumento tiene un tacto diferente. Existen los sonidos graves y agudos, dependiendo del instrumento, A Oli le parecía muy interesante, así que prestó mucha atención.
-Bueno, Oli. ¿Empezamos ya?
-Vale.
-Lo primero que vamos a hacer va a ser un experimento para conseguir sonidos agudos y graves. Para ello necesitamos cuatro copas de cristal y agua. Vamos a echar el agua de más cantidad a menos cantidad, ¿ves?
Oli observó que el primer vaso estaba casi lleno, el segundo un poco menos, el tercero un poco menos y el cuarto ya no tenía agua.
-Sí, lo veo.
-Ahora vamos a humedecer un poco el dedo índice y vamos a frotar levemente el borde de la copa.
Así, Leonardo se humedeció un poco el dedo y empezó a frotar la superficie de la copa formando círculos. Al principio no se escuchaba nada, pero, finalmente, se empezaba a escuchar un leve sonido en todos los vasos.
-Vaya. Es impresionante. ¿Puedo probar yo?
-Por supuesto. Toma.
El búho le cedió las copas y empezó a repetir lo que había hecho Leonardo antes. Después, pudo experimentar ella sola y decidió darles pequeños golpes a las copas para conseguir otro sonido diferente. Y, así, es cómo compusieron una nueva canción del Bosque.
-Bueno, ahora que ya hemos trabajado el oído, ¿te parece si empezamos por le tacto?
-Vale.
-Pues entonces es muy sencillo. ¿Te gusta la plastilina?
-Sí, porque puedo darle formas y es de colores.
-Me alegro, porque ahora trabajaremos con ella.
-Bieeeeeen - respondió la ardilla.
-Pero hay que tener mucho cuidado, porque también usaremos palillos y no nos podemos hacer daño, ¿vale? Sino, a ver como seguimos experimentando otro día.
-Vale. Tendré cuidado.
-Pues empecemos. Para empezar, vamos a hacer cilindros con la plastilina. ¿Sabes cómo sonlos cilindros?
-No.
-Pues son como los troncos de los árboles o como los churros que te tomas en el desayuno. ¿Sabes?
-sí.
Y Oli comenzó a darle forma de churros a la plastilina de color violeta.
-¿Cuántos hago, Leo?
- Seis. Tienes que hacer seis.
-Está bien.
-Ahora que ya los tienes hechos, vamos a clavar los palillos ahí, ¿vale? Pero tiene que quedar a la misma altura uno que otro y va a cambiar la distancia entre ellos. Así, ¿ves?
El sabio búho cogió una regla de su cajón y midió los churros de plastilina para que fueran del mismo tamaño. Después, marcó unos puntos en todos los churros, pero a distinta distancia. Así, consiguió un churro con palillos separados 4cm, otro con palillos separados 3cm, 2cm, 1cm, 0,5 cm y 02 cm.
-¿Ves? Ahora con mucho cuidado y suave vamos a ver cuántos pinchacitos notas en el antebrazo, en la palma de la mano y en los dedos. ¿Te apetece probar?
-Siiiiii.
-Pues ahora dime cuántos notas - le dijo Leo.
Al cabo de diez minutos ya había probado con todos los churros de plastilina, y OLi se dio cuenta de que no percibía el mismo número de pinchazos en todas las zonas.
-¿Por qué con tercero noté un pinchazo en el antebrazo y dos en la palma y los dedos?
-Es cuestión del tacto. Y es que tenemos más desarrollado el tacto en esas partes, por eso notas dos palillos en la palma de la mano y los dedos.
-Por eso usamos las manos para casi todo.
-Efectivamente. Ahora se está haciendo tarde y deberías volver a casa.
-Si, empiezo a tener un poco de hambre. Gracias otra vez, Leo.
-Hasta nuestra próxima aventura, Oli. Y no olvides que la vida se trata de experimentar y sentir todo.
-No lo olvidaré.
Y patachín, patachán, investigando... ¡algo nuevo descubrirás!
Reflexión Didáctica . . .
1.Indica que debe y que puede entender un/a alumno/a de Educación Infantil sobre temas relacionados con los sentidos.
Para comenzar, en el Currículum de Educación Infantil, centrándonos en el segundo ciclo, se especifica que uno de los contenidos que se deben de llevar a cabo en el aula es el de "los sentidos y sus funciones: sensaciones y percepciones", dentro del bloque 1: el cuerpo y la propia imagen.
Desde nuestro punto de vista, es necesario, como primer paso, conocer los cinco sentidos y saber en qué consisten. Así, deben entender que existen cinco sentidos que son: vista, oído, tacto, gusto y olfato. Y, a partir de esa base, comenzar a experimentar con ellos los diferentes sentidos.
Una vez sabido esto, es necesario que sepan donde se encuentra cada sentido y conocer los diferentes tipos de estímulos que existen. Por ejemplo, en el sentido del gusto deben saber que existen diferentes sabores y que no todos son agradables para todo el mundo, puesto que cada individuo es diferente. Después, habría que trabajar con diferentes actividades para que experimenten por ellos mismos que esto es así, dejándoles probar, oler, ver, sentir y oír.
Por último, destacara la importancia que los sentidos tienen en la sociedad, puesto que hay que ver muchas cosas, saborearlas y tocarlas. Además, es necesario recortarles a los niños que no todas las personas tienen los sentidos igualmente desarrollados y que, en algunos casos, hay carencia de ellos, como en el caso de las personas ciegas o sordas. Y, podríamos aprovechar este tema, para trabajar la cooperación y la empatía.
2.En la práctica no se trabaja el sentido de la vista. Propón alguna experiencia para completar esta práctica con ese sentido.
Para empezar, podríamos trabajar el oído a través de una canción, con la que, además, también trabajaremos el ritmo y la melodía. La canción sería la siguiente y está orientada a conocer las diferentes notas de la escala del Do:
Canción de la ESCALA MUSICAL
Do(n) es trato de varón,
Re(s) selvático animal,
Mi denota posesión,
Fa(r) es lejos en inglés,
Sol ardiente estrella es,
La al nombre es anterior,
Si asentimiento es.
Y de nuevo viene el Do.
Do, Re, Mi, Fa, Sol, La, Si, Do
Para trabajar la vista, emplearíamos una actividad que suele llamar mucho la atención y que pondríamos a la naturaleza como una parte importante del proceso. Consiste en coger un libro que los niños tengan por clase, a poder ser uno que cause cierto interés, y poner encima un papel de cocina transparente sin muchas arrugar para que se vea mejor. Una vez preparado todo, pondremos gotas, mayormente grandes, para ver como las letras del libro se agrandan cuando ponemos las gotas de agua encima.
A la hora de trabajar el sentido del tacto, tenemos que tener en cuenta la experiencia de los niños y, por ello, emplearemos elementos cotidianos, como algodones o cordones. Se trata de poner en una caja que esté separada por departamentos diferentes estímulos con diferentes grosor, textura, etc , para que los niños intenten averiguar de que se trata. Además, también echaremos mano de un recurso muy importante en la Educación Infantil: el cuento. Para ello, emplearemos el cuento Cuac, que permite experimentar a los niños alpoder tocar las hojas del libro.
Y, por último, podríamos echar mano de algunas adivinanzas que tanto le gustan a los niños relacionadas con los cinco sentido. Por ejemplo:
Una señora,
muy enseñoreada,
siempre va en coche
y siempre va mojada
(La lengua)
Tengo un tabique en el medio
y dos ventanas a los lados
por las que entra el aire puro
y sale el ya respirado
(La nariz)
Dos niñas asomaditas
cada una a su ventana;
lo ven y lo cuentan todo,
sin decir una palabra
(Los ojos)
Tiene grandes pabellones,
pero no tiene habitaciones
(La oreja)
3. Valora la actividad que realizaste en su conjunto. Que aprendiste desde el punto de vista científico?
Las actividades te enseñan que existen diferentes sentidos y que puedes experimentar con ellos de diferentes formas. Algo que nos pareció curioso fue el hecho de hacer los sonidos más agudos y más graves con los vasos de agua, puesto que suponíamos que sería darle golpecitos al vaso para que sonara. Sin embargo, descubrimos que se pueden conseguir sonidos tocando levemente la superficie del vaso.
Con respecto a la actividad del tacto, que consistía en pincharte con unos palillos para ver si sentías dos palillos o uno, también fue muy interesante. Aprendimos que no todo es lo que parece y que si juntas los dos palillos cada vez más, ese dos se convierte en uno. Además, también nos dimos cuenta de que tenemos diferente percepción del tacto dependiendo de si empleamos el antebrazo, la palma de la mano o los dedos.
Así, aprendimos más cosas sobre estos dos sentidos que configuran la práctica número 7.
4. Desde el punto de vista didáctico?
Desde el punto de vista didáctico, nos dimos cuenta de que podíamos emplear elementos de la vida cotidiana, como las copas de vidrio o los palillos, para trabajar los sentidos de una forma más entretenida. Estamos seguras de que emplearemos esta clase de actividades con los niños de nuestras futuras aulas.
Además, el estructurar las actividades desde lo más básico hasta lo más complejo es algo que hay que tener en cuenta con los niños, puesto que pueden emplear conocimientos ya adquiridos en las nuevas actividades propuestas.
5. Reflexiona sobre los posibles peligros, las precauciones y cualquier otro aspecto relacionado con la seguridad a la hora de trabajar los sentidos con alumnos de Educación Infantil.
A la hora de llevarlo a una aula de infantil, habría que tener cuidado con dos cosas principalmente:
1: Las copas de vidrio: puede que caigan al suelo y se llene el suelo de cristales con los que se pueden hacer daño los niños. Por ello, es necesario probar con otro material previamente o, bien, hacerlo bajo una vigilancia extrema por lo que pueda pasar.
2: Los palillos: puede que los niños se lo claven demasiado fuerte y que no controlen su fuerza o su motricidad. Así, habría que probar con un objeto menos punzante o realizar las actividades nosotras con mucho cuidado. Así, se complicaría la tarea al estar pendientes de todos los niños pero aumentaríamos la protección de los pequeños.
Otro aspecto a tener en cuenta sería el agua de las copas con sus mediciones. No es que puedan causar gran daño con ella pero se puede derramar por la mesa y mojar a los niños. Por lo tanto, es necesario una vigilancia extrema en todos los casos para garantizar la seguridad de los niños en los casos que sea necesario. Además, habría que intervenir en el caso de que algún niño se pelee con otro y emplee el instrumental , puesto que el cristal y los palillos pueden herir a los niños.
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